Aunque las sesiones no tienen una duración fija, normalmente se extenderán entre 50 y 70 minutos. ¿Por qué?
Porque el nudo de la sesión se desenmarañará en algunas ocasiones en 40-45 minutos y en otras en 55-60.
¿Por qué dejo más tiempo después? Porque esto no va de que tú sueltes el rollo, te vacíes y hasta la próxima semana que «te llenes» otra vez. Esto va de que tú te lleves algo con lo que trabajar mientras estás en tu Vida para fomentar la transformación profunda, duradera y sostenible.
Para eso, me gusta hacer «devoluciones», compartir contigo un análisis, ampliar la perspectiva del problema, crear y proponerte tareas adaptadas a ti… por lo que yo necesito un tiempo extra en el que ofrecerte toda esta información y que te lleves «algo» de la sesión; un desafío, una tarea, un insight, etc.